Es muy importante llevar a cabo buenas rutinas de cepillado saludables para que la buena higiene bucal sea duradera, para prevenir el mal aliento y otras enfermedades.

Por tanto, para ello, debemos seguir ciertos hábitos en el cepillado para tener unos dientes, encías, lengua y boca saludables.

Con el fin de tener una buena higiene bucal es necesario visitar al dentista al menos dos veces al año.

En el caso de los niños aumentaríamos la frecuencia, ya que al estar en continuo desarrollo pueden tener mayores dificultades.

Mantener una boca limpia es muy importante. Aquí entra el famoso cepillado, esencial para tener unos dientes blancos,limpios y sanos.

Es una parte muy importante en la higiene bucal y no todos saben como realizarlo.

Técnicas para un buen cepillado:

• Inclinar el cepillo a un ángulo de 45º contra el borde de la encía y desliza el cepillo alejándote de ese mismo borde y hacia delante.
• Cepille suavemente el exterior e interior y la superficie de masticación de cada diente con movimientos cortos hacia atrás.
• Cepille suavemente la lengua para eliminar las bacterias y refrescar el aliento.

Para llevar a cabo una perfecta limpieza bucal necesitaremos más que un buen cepillado.

Son necesarios varios complementos al cepillado:

Hilo dental

La placa y los restos de alimentos son difíciles de alcanzar, especialmente los que están entre la línea de la encía y el diente.

Para llegar a estos restos utilizaremos tanto el hilo dental como el cepillo interproximal.

Técnicas para el buen uso del hilo dental:

• Utilice unos 45cm(18″) de hilo dental,dejando 3 ó 5 cm(1 ó 2″) para trabajar.
• Sigue suavemente las curvas de sus dientes.
• Asegúrate de limpiar debajo de la encía, pero evite golpear el hilo contra la misma.

Irrigadores dentales

Consiste en un aparato que lanza un chorro de agua con bastante precisión sobre los dientes. Aparte de eliminar la placa en encías y dientes, también arrastra las bacterias y estimula las encías.

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